BAUTIZO DE OFICIALES Y SOLDADOS DE CABALLERÍA BLINDADA E INVESTIDURA DE CABALLEROS Y ESCUDEROS


“BAUTIZO DE OFICIALES Y SOLDADOS DE CABALLERÍA BLINDADA E INVESTIDURA DE CABALLEROS Y ESCUDEROS”

EL ORIGEN DE LOS CABALLEROS

Debemos hacer una pequeña referencia de cómo comenzaban estos valerosos guerreros desde sus primeros años; y es así como encontramos a los ESCUDEROS, quienes eran personajes importantes para la CABALLERÍA.

Los ESCUDEROS por lo general eran hijos de nobles CABALLEROS, quienes a la edad de siete años eran retirados de las manos de su madre, para así iniciar con una educación varonil, especialmente en juegos militares y en la mansión paterna.

A la edad de catorce años los escogidos luego de algunos años de entrenamiento, eran conducidos al altar por sus padres, lugar en donde un sacerdote cogía una espada y un cinturón del que cuelga la espada, que después de bendecirles las ceñía al joven quien luego de esta ceremonia se transformaba en ESCUDERO; en este ritual el nuevo miembro prometía lealtad y amor a padrinos y madrinas, para luego ser calzado con espuelas de plata, posteriormente se ponía al servicio de algún paladín, quien con su experiencia y en combate le iba enseñando el arte de la guerra.

Pero el asunto no era así de sencillo, el joven ESCUDERO, a más de ser el encargado de llevar el escudo, el yelmo, la lanza y de cuidar los caballos de su señor, tenía que, en ocasiones, defenderlo, cuidarlo y especialmente salvarlo cuando herido caía por efectos de la lucha.

En los torneos se le permitía pasar la lanza a su amo y en ocasiones dar muestras de su valentía y coraje.

A fin de ser digno de recibir la orden de CABALLERÍA u orden militar, el joven soldado, debía pasar la noche entera en oración, penitencia, luego de lo cual recibía la Eucaristía, se vestía de traje blanco en señal de pureza y luego de lavarse metódicamente, se colocaba un traje escarlata en señal de su deseo de derramar sangre por la religión y se cortaba la cabellera en señal de servidumbre.

Hacía la velada de las armas pasando en oración toda la noche. Al llegar el amanecer conducido y acompañado por sus padrinos, el sacerdote y sus escuderos, ingresaba al altar, colgando su espada de un tahalí, el religioso lo bendecía y éste pasaba a arrodillarse frente al que lo iba a ARMAR CABALLERO, el que le preguntaba:

“¿Conque intención quieres entrar en la orden?

¿Para enriquecerte?

¿Para tener descanso?

¿Para alcanzar honores sin honrar a la CABALLERÍA?

Vete no eres digno de ello”.

El joven valiente respondía para honrar a DIOS, a la RELIGIÓN y a la CABALLERÍA y lo juraba sobre la espada de su señor, momento en que era ARMADO CABALLERO.

Levantándose el señor de la silla le daba tres golpes de plano con su espada desnuda en la espalda, o en el cuello o la bofetada, última injuria que debía sufrir sin tomar venganza y le decía; “En nombre de DIOS, de SAN JORGE, de SAN MIGUEL, te declaro caballero, sé valiente intrépido y leal”.

Así el joven soldado es ARMADO CABALLERO e inicia su travesía por las Órdenes caballerescas, que como se explica posteriormente son Órdenes militares.

Se define como órdenes militares, “la disciplina, destreza militar y enseñanza de las cosas de la guerra”, lo que supone la constitución de unidades guerreras más o menos numerosas, cuyo principal objetivo es combatir, pero no de manera desorganizada indisciplinada, sino con perfecto ordenamiento de sus elementos, lo que permitió la formación de verdaderos ejércitos.

Las Órdenes Militares o de caballería, también conocidas como Órdenes Ecuestres, han sido algunas puramente militares, dedicándose al combate, otras, hospitalarias y las más, reuniendo ambas cualidades, sosteniendo a sus expensas tanto los establecimientos benéficos, en que se ejercía la misión de caridad. Los ejércitos, que estaban dotadas de importantes recursos económicos, y al poner los bienes en manos de los Maestres, reunían ciudades, villas, castillos e inmensos territorios y vasallos, base de su poderío.

INVESTIDURA DE CABALLEROS Y ESCUDEROS

Esta actividad se realiza en las unidades de CABALLERÍA BLINDADA en las festividades del arma, con esta ceremonia simbolizamos el recibir en el seno del arma al subteniente o soldado recién graduado, en quienes confiamos que con sus grandes virtudes que son propias del soldado del overol y la espuela, serán los sucesores de la herencia heroica del arma de CABALLERÍA BLINDADA

Al ser envestidos se nombra a: “DIOS” que representa la creencia del soldado a una religión; “SAN JORGE” que es el patrono del arma de CABALLERÍA BLINDADA y representa la lucha por la justicia y el bien; y a la “CABALLERÍA BLINDADA” que es el arma a la que pertenecen los subtenientes y soldados recién egresados.

En una ceremonia social, donde se encuentran invitadas, las autoridades militares, civiles, invitados especiales y familiares de los recién egresados, se considera lo siguiente:

  • Los oficiales serán armados de “CABALLEROS” y los soldados de “ESCUDEROS”.
  • Los oficiales para este evento estarán con uniformes de granaderos y los soldados con el uniforme 4-A.
  • Se hará el ingreso de los oficiales y soldados moros con sus respectivas damas o madrinas, adoptando una formación de acuerdo al espacio físico del escenario.
  • Los oficiales y soldados moros estarán acompañados de una dama o madrina.
  • Habrá el ofrecimiento del acto a cargo del señor comandante de la unidad.
  • Se dará lectura a una reseña histórica del porqué de esta ceremonia de investidura de caballeros y escuderos.
  • En el centro del escenario habrá una mesa donde estará ubicado un sable, el cual será utilizado para la envestidura.
  • Los oficiales superiores de más alta jerarquía presentes en el acto, realizan la envestidura, quienes, con el sable de CABALLERÍA, topan al bautizado en los hombros y cabeza diciendo “POR DIOS, SAN JORGE y la CABALLERÍA BLINDADA, te declaro caballero o escudero, sé valiente intrépido y leal”.
  • Al finalizar la ceremonia se realizará el brindis tradicional de la CABALLERÍA BLINDADA. Con los subtenientes y soldados recién bautizados.

Cfog.